Psicodrama - Taller "Desatando Nudos"
Es un método terapéutico, que potencia
el crecimiento personal y el aprendizaje en habilidades para la vida. Es
eficaz, rápido, potente -y lo más importante- BREVE; considerando que hoy en
día vivimos saturados de actividades, dónde el tiempo no nos alcanza para lo
que es verdaderamente importante: ¡nuestra
calidad de vida emocional!
El psicodrama fue creado por Jacob Leví Moreno, inspirado en el
teatro de la improvisación o teatro espontáneo. En él se combina el juego
teatral, el movimiento del cuerpo, lo simbólico con la palabra y la reflexión.
Te orienta fundamentalmente a la acción, te invita a mirar desde otro lugar, a
abrir y ampliar tu mapa, a generar opciones y a encontrar tus
alternativas de cambio, las que mejor se adaptan a tu estilo de vida, a tus
valores, a tu esencia.
¿Para que te
sirve?
Para darte cuenta de lo
que te pasa, de lo que sientes y de lo que haces en consecuencia.
Para darte cuenta de tus circunstancias, tanto de las que te
limitan como de las que te facilitan tu éxito personal y la conquista de tu
felicidad.
Y con ello poder decidir sobre aquellos aspectos
que quieres y puedes cambiar o mejorar.
Enfoque del trabajo by Carlos Alberto Rapolla - Psicólogo Social
y Teatrista.
Desatando Nudos® se realizará en grupos
por una razón muy sencilla: porque el ser humano vive en grupos, trabaja,
aprende, juega y se divierte en grupos. De hecho la fuerza terapéutica del
psicodrama proviene de la dinámica y energía del grupo que participarán
activamente en la representación de los diferentes roles o papeles presentes en
la situación propuesta por el Coordinador y el mismo grupo y que serán protagonistas para que el juego tome su
escena. De esta forma las personas cumplen una función elemental: ayudan al
protagonista de la escena propuesta a cubrir los personajes que la
conforman; pudiendo ser estos: el padre, la madre, hermanos, la pareja, un
jefe, un concepto abstracto (el dolor), un valor (el amor), una acción (el compromiso),
con esta situación propuesta servirá para explorar, develar y resolver.
Al final el trabajo psicodramático su
función es comentar lo vivenciado desde su lugar de espectadores, desde la
resonancia emocional.
Esto quiere
decir que en este espacio no se permiten las opiniones provenientes de la
razón, ni los consejos, ni los juicios de valores. Se crea un lugar especial
para abrir el corazón y hablar desde él.
Por lo tanto las intervenciones de las
diferentes personas son desde sus experiencias vitales, convirtiendo al grupo
en un sistema terapéutico y de crecimiento en dónde cada integrante se beneficia, aprende y crece.
Esto es clave para el grupo: crea un
clima de respeto, confianza, tolerancia y aceptación incondicional. El mensaje
que llegará a cada participante es: “no te juzgo, te respeto, te entiendo,
empatizo, me identifico en tu historia”.